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"—Prométeme que esto no te arruinará.
—No lo hará —dijo—. No porque no me importes, si no porque tuve la fortuna de conocerte"
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El último año de instituto de Mara Carlyle se desarrolla de la forma esperada hasta que un día: ¡bum!, uno de sus compañeros estalla en mitad de la clase. Ése será el primer caso, pero no el último, de una alocada serie de combustiones espontáneas que pondrá en jaque la vida de Mara y el orden normal de las cosas.
A partir de entonces, Mara hará lo posible por graduarse de una sola pieza. Y es que su último año está siendo verdaderamente explosivo: tiene que lidiar con una sorpresiva historia de amor, cuarentenas, hongos alucinógenos, blogueros, camiones de helado, Bon Jovi y las expresiones más groseras que hayas oído decir nunca al presidente de la nación.
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El eterno cuestionamiento de porque la vida conlleva muerte se explora de forma cómica y relajada mientras vemos a Mara tratar de entender... la propia vida. Sus cuestionamientos me parecieron bastante honestos, me hicieron reír y también reflexionar; por ello, el libro cumple bien su función de dejarnos con las espinita de descubrir quienes somos y porque estamos aquí.
Fuera de ello, la historia de Mara funciona bastante bien. Tiene buenos momentos, las narraciones son buenas para entender a los personajes e incluso sentir pena por ellos, eso sí, quien se roba mi corazón es Dylan, la contraparte de Mara y su inesperado interés amoroso. Digo, quien no quisiera amar, podría ser la última oportunidad 🤷♀️. Dylan es igual de honesto, romántico, un nerd y bastante creíble. Igual Mara, quien el hecho de que no me haya caído tan bien, la hace igual de real. El resto de la historia los veremos enfrentar esta situación mientras se enamoran y prueban muchas cosas por primera/última vez.
La verdad que no puedo darle muchas vueltas a esta novela, al ser bastante sencilla y lineal, pero sus momentos reflexivos funcionan y hubo bastantes páginas que marqué por sus diálogos que hicieron eco para mí. Eso es la mejor parte de cualquier novela, encontrar esa frase o escena en la que te puedes reflejar. Además, me encantó el final, terminó justo como quería.
También, quería agregar que existe una adaptación de esta novela, la cual adoré bastante. Resultó mejor de lo que esperaba y he amado al Dylan en pantalla, sigue robando corazones su honestidad <3.
Para terminar, "Espontánea" es una excelente novela para reír y pasar el rato, sin restarle importancia a como maneja las complejidades de la vida y el crecer; dejándonos con una pregunta en mente al leer la última frase...
¿que harías hoy si explotáramos mañana?
¡Bonitas Lecturas!
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